Pajaritos,Pájaros y Pajarracos...

No es el espíritu de Chávez el único pajarito político venido del otro mundo a sembrar los alpistes de
la duda metafísica. Dicen que también Gabriel Valdés aparecióse como un plumífero emisario de sí
mismo poco después de abordar la barca de Caronte para atravesar la laguna Estigia. ¿Dónde fue? no
lo recuerdo,es que soy tan pajarón de repente.
No deben ustedes sacar conclusiones apuradas de mis condiciones cívicas- son pocas pero bien claras-
a partir de esta coincidencia que evoco,así,al escéptico vuelo pensante; la política es a la vez muy volá
til y pesada,muy pesada. Volátil en su moralidad y pesada como el tóxico plomo en su aspecto mediá-
tico: ha empezado lento,pero seguro,el parloteo electorista en que los loros marean la perdiz al ciuda-
dano. Eso,muchachos,incentivemos el voto nulo.¡No al voto!¿vale la pena? que no te pillen pajareando
¿Porqué nuestra ave nacional es un buitre vestido de etiqueta en el cogote? ¿Porqué su encarnación en
personaje de historieta exige una explicación que nunca se la dan? Apocada es el alma nacional,y carro
ñera de si misma,o achorada inútilmente,fingidora de la eficencia macroeconómica,codiciosa como la
urraca que se aprovecha del vecino.
Parece que tengo malos pájaros en la cabeza. Las palabras pueden ser como el zumbido de las moscas
de un Verano perdido: puro alimento de picaflores efímeros.
El Invierno promete moscas atontadas por el frío y días ahogados sin lluvia. Partículas de smog pega-
das en los pelos internos de la nariz Santiaguina,irritándonos la mucosa del alma,ofuscándonos-y con
razón-a aborrecer esta ciudad en demolición que aspira en convertirse en un enjambre de edificios
donde impera el mal gusto del Chileno emergente,y ustedes,seguro,deben estar de acuerdo con esa des
trucción del discreto encanto que aún le queda a Santiago,acomplejada y arribista Capital que se odia a
si misma.
Pajarito de Chávez,pajarito de Valdés,ángeles alados. ¿Qué mensaje traerían o intentaron trasmitir?
nadie lo supo,nadie lo sabe,nos pillaron volando bajo.
Cuando era  niño,en el subsuelo del País Republicano de los años 60,en las esquinas de aquel Santiago
anterior a estas demoliciones con logaritmos financieros,se le llamaba "pajarito" al miembro viril pre-
púber,aturdido por el borde siempre en alza de las minifaldas liceanas. Siempre se recuerda la leyenda
de la mano lasciva que con el impune garfio del dedo bajó hasta los tobillos un calzón de lolita en plena pisadera de una micro atiborrada.
Pajaritos en la cabeza,pajaritos en la mano. ¿Sexualidad y política en Chile? buen tema,de eso iba a
hablar,conceptual y profundo,pero otro gallo se puso a cantar.

Que tengan Muy Buenas Noches.
Que Descansen.