lunes, 8 de abril de 2013

Simplemente porque Si.


No podemos sino reaccionar con indignación cuando la gente les da un sentido político a las cosas que
nos gusta hacer por puro placer,ya se trate de lectura,de la vida al aire libre o de la experiencia cotidia-
na de la intimidad.
Siempre hay alguien dispuesto a considerar que estas actividades son buenas,son sanas,son proyecta-
bles "a nivel País" y que sería necesario,por lo tanto,fomentarlas.
No sólo los políticos hablan de este modo cada vez que pueden. Se trata de un discurso que ha infiltra-
do el sentido común mayoritario. En Facebook circula la fotografía de unos manifestantes callejeros
que sostienen--me parece que como una manera de hostilizar a un piquete policial--un lienzo donde
dice: "Cuando se lee poco se dispara mucho". No sé de dónde sacaron esa deprimente falacia y no he
podido descifrar qué tiene que ver una cosa con la otra. Me imagino que la mayoría de la población de
Chile ha leído muy poco o nada y no ha disparado ni un mísero balazo en su vida.
La lectura como realización absoluta,como deslumbramiento y desdoblamiento de la realidad,la conoci
mos en aquella lejana región de la edad denominada "preadolescencia" y se nos dio de manera gratuita.
Enfatizaría esta palabra: "Gratuidad".
No empezamos a leer por afianzar nuestras fortalezas morales,ni por aprender,ni por complacer a los
que nos enseñaban: lo hicimos simplemente porque sí.
Un día abrimos un libro y nos pareció que tras la portada había una puerta entreabierta: mas allá había
un camino,bifurcaciones,paisajes,imprecaciones,amores,batallas,melancolía,ciudades fantásticas,fanta-
sía,sueños,horror,muerte,olvido,lo que sea que constituye lo que vislumbramos en el concepto de
Mundo.
Incluso yo recordaría la postura contraria a la exaltación moral de la lectura: la idea de que los libros le hacen mal a los jóvenes,como le hicieron mal alguna vez a Alonso Quijano y a Madam Bovary. Es
decir: meten cosas en las cabezas en formación o débiles por la tendencias fantasiosas o simplemente
inmaduras.
Esta es una verdad a medias pero siempre hay una oportunidad de comprobarla. Pensemos en nosotros
mismos en la lejana y difícil juventud: cuánta idiotez incorporada a nuestras convicciones (y a nuestra
conducta también) como destilado de lecturas afiebradas: Romanticismo,Surrealismo,Decadentismo,
Dadaísmo. La humana necesidad de adorar Dioses la transferimos a una galería confusa de héroes rela
tivos,de fracasados iracundos,de vanidosos,de dandies vociferantes,de inadaptados sociales,ególatras,
ideólogos sectarios. Imágenes deformadas sobre el suicidio,sobre la voluptuosidad,sobre el egoísmo: fuimos pasto de muchos fuegos ideológicos.
Como haya sido,no hay cómo escamotear la experiencia en la vida de nadie.
Uno está hecho de sus errores tanto como de lo que se nos reconoce como aciertos o éxitos o realiza-
ciones. Ya no podría operar como político porque se me olvidaría el rol fundamental,el de encauzar las
masas. Lo único que quisiera brindar es Libertad o--por decirlo de una manera escéptica-- una Ilusión
de Libertad.

Que tengan Muy Buenas Noches.
Que Descansen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario