El Infierno de las Cárceles Chilenas.

                      Las increíbles exigencias para entrar a un Recinto Penal...de visita.

Entre "Tormentas Solares" que se avecinan,Tribunales de La Haya,acontecimientos Apocalípticos
que,según agoreros Chantas se nos vienen encima,hay noticias que pasan desapercibidas para el
común de la gente,no así para el que diariamente tiene que tragarse esa amargura,esa impotencia
de no poder hacer nada; sólo agachar la cabeza y seguir adelante...

La primera vez que Sergio Contreras llegó a la Cárcel fue a mediados de los años 80,cuando era Pro-
fesor de la Penitenciaría y los presos,como dice él "no eran tan violentos como los de ahora y tenía
confianza con los que hacía clases".
Hace dos Domingos volvió para visitar a un amigo en el Penal Santiago1,y la experiencia esta vez fue
mas bien,traumática.
Mientras avanzaba la fila vio con impotencia cómo otras personas se iban colando al principio de la
cola gracias a una señora a la que le habían pagado previamente. Lo peor vino después cuando llegó
a la caseta. "Me dijeron que no podía entrar con las llaves del auto,pero una señora me dijo que en los
locales del frente las cuidaban por dos mil pesos. Tampoco podía entrar con mi tarjeta Bip!,pero afuera
de la Cárcel hay un carrito donde las cuidan por 500 pesos. Lo encontré terrible",dice.
Y él ni siquiera pudo entrar. "Me dijeron que no se podía ir con pantalones cortos. Otro gendarme,
después,me contó que también al frente arriendan pantalones por tres mil pesos. Me fui muy enojado".
Según Sergio Contreras,usted no puede llevarle a un reo un sandwich de jamón-queso. Pero sí uno de
jamón y otro de queso..?? un churrasco no puede llevar más ingredientes que pan y carne,las galletas
y golosinas deben ir abiertas y en bolsas transparentes.
"Todo es parte de los Protocolos",explica Juan Mella,Presidente de la Asociación Nacional de Funcio-
narios Penitenciarios.
--Si la persona ingresa con short adentro se cambia pantalón y lo que queda es la figura que ingresa.
Yo puedo ir con pantalones cortos,de lentes y barba,pero luego adentro,me cambio pantalones,me afeito y salgo como otro interno. Si anda con pantalones largos para nosotros va a seguir siendo la
misma figura.
--Con la tarjeta Bip!,nos podrían sorprender,y tenemos muchos casos de suplantación de personas al
interior de las Cárceles. En este caso,por ejemplo para que otro reo no la vaya a ocupar como vía de
escape.
--No se pueden llevar llaves que puedan ser usadas como armas. Y debe ir con la misma apariencia con
la que aparece en su carnet de identidad. Si llega con barba y no aparece así en su cédula,no va a entrar.
--Lo de la comida sólo pasa en las Cárceles Concesionadas como Santiago1 o Rancagua. Allá la comi-
da se las entregan preparadas a los reos. Pero si se intoxica uno,es responsabilidad de la Cárcel.  Y si se
intoxica con comida que le han llevado de afuera,es responsabilidad de Gendarmería.  No podemos asu
mir un costo en este sentido.

"Todo es parte de los Protocolos",muy conforme,pero todavía no entiendo el asunto de los pantalones
cortos,me parece haberlo visto en una película de los 80,aparte de ser una película chanta no la entendí,
como tampoco entendí la explicación de Don Juan Mella.
Lo de la comida,lógico: si a un churrasco,le echas palta,tomate y harta mayo,con las horas que tienen
que esperar para entrar,al momento de ingerirlo es una bomba!
Pero con el jamón-queso ¿no creen que le están poniendo mucho,Lucho?


                                                           El Infierno de la Prisión.

¿Qué es lo más impresionante de la Cárcel para quien la conoce? El Olor. cuenta una Abogada que ha
visitado clientes tras las rejas. "Una mezcla de orina,mierda,humedad,encierro...como que te pega un
combo en pleno hocico",describe.
Una vez dentro,ese hedor te acompaña para siempre,pero es solo un detalle al lado de tanta indignidad.
En un contexto de locura,nada tiene de raro que en la vecindad de cada Penal se instale una Feria Persa
con los servicios más extravagantes: es señal de que cada preso--por "malo"que sea--sigue rodeado de
su Familia y Amigos,quienes deben adaptarse a la vejación sistemática cada vez que quieran verlo.
Gendarmería podrá tener normas muy sensatas para evitar fugas,pero no puede confundir y denigrar a
gente cuya única infracción es querer a un tipo que cometió un delito. Obviamente cogotear,estafar o
traficar merece sanción,pero algo estamos haciendo muy mal como Sociedad al Administrar un Sistema
Penitenciario que deshumaniza a hombres,mujeres y niños.
¿De qué nos sirve mantener miles de Chilenos enajenándose en inmundas ollas a presión?
¿Acaso quien delinque deja de ser persona y pierde incluso el derecho a ir al baño tranquilo?
¿Este escarmiento brutal sirve para rehabilitar,o es solo venganza para que la Sociedad sacie su rabia?
Las fétidas Cárceles Chilenas son el Infierno en la Tierra.
Ojalá nunca debamos entrar a una de ellas,ni siquiera de visita.

Que tengan Muy Buenas Tardes.