domingo, 31 de mayo de 2015

Murió la Flor.


 Mi perro está cerca mío,al principio pensé un cariño y una dedicación por retribución a lo que
yo le he entregado. Me dí cuenta que sólo quería jugar y de ahí esa insistencia de estar junto a
mi persona.
 Luego,al notar cierta indiferencia de mi parte,se alejó de mi lado tendiéndose a dormir al leve
calor que todavía da este sol de Invierno,que se acerca muy rápido.
 Irónicamente,con las personas ocurre algo parecido,mientras se les está entregando cariño,amor,
estabilidad,muchas están al lado tuyo. Por cualquier tipo de problema llámese sentimientos o
inestabilidad económica,comienzan a buscar "lo que se ha perdido en la relación"argumentando
no estar satisfechas y alejándose de a poco del entorno hasta esfumarse del todo.
 A veces existe un retorno,se disculpan largamente por la actitud errónea que tomaron,prometen
muchos cambios que nos costará asumirlos,piensan que las ideas y sentimientos serán como
antes. Creen que a la persona afectada podrán sutilmente cambiarla para que acepten sus pensa-
mientos y su persona.
 Pero,muchas veces no quieren darse cuenta que, como cantaba con esa voz que a muchos nos
hacía temblar el alma,Germaín de la Fuente: "Murió la Flor".
 Por eso amo a mi perro,él nada pide,solamente un poco de cariño y atención. Si en un momento
dado no puedo atenderlo,no importa,él espera hasta que le llegue su turno,es muy feliz con lo
que le entrego. No habla,pero en su mirada lo dice todo.

 Que Tengan Buenas Noches.
Que Descansen.

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