miércoles, 4 de marzo de 2015

¿Hasta cuándo sigue el Circo?


En el libro "Piloto de Guerra" escrito por Antoine de Saint-Exúpery,el mismo de "El Principito"
existe una página que,al leerla se nos aprieta la garganta como una garra de acero: "El Gran Circo
se ha ido. El público está satisfecho. El programa era bastante cargado,los actores no demasiado
malos,y los leones se han comido al domador. Volvemos a hablar en familia algunos días después.
Y aún cuando todo haya sido olvidado (la fanfarria,el fuego de artificio y los hermosos uniformes)
sobre la plaza del pueblito quedará todavía la aureola del aserrín de la pista y los agujeros de las
estacas. La lluvia y el olvido borrarán rápidamente las huellas. Mis camaradas sobrevivientes del
Gran Circo felizmente no han comprendido (yo tampoco) y esto será nuestra única recompensa.
Somos objetos de la incoherencia general,somos parte de una gran construcción cuyo conjunto
solo podrá ser descubierto con más tiempo,más silencio,más retroceso".
¿No es acaso ésa la mejor descripción para el Chile de hoy? Creímos ingenuamente en un País.
En un País donde nunca,ni en las peores pesadillas,sospechamos que un mal día el cinismo,el
descaro y la codicia ahogarían todo aquello que soñamos.
Ya la copa está quebrada y todos sabemos que un vidrio roto no puede repararse. No sabemos
que ha pasado,pero respiramos una incoherencia general que huele muy feo. Me hace acordar a
los mininos cuando hacen sus necesidades,las tapan. La inmundicia queda oculta,pero la fetidez
queda por mucho tiempo alrededor.
Del País decente y cariñoso que buscaba lo mejor para sus hijos,¿qué ha quedado? ¿O que alguien
luchó y puso su vida en peligro para que en Chile,el ingreso mensual de los 1.200 individuos más
ricos fuera 1.200 veces el ingreso del 99% más pobre y casi 3.000 veces mayor que el ingreso
promedio del 80% de los Chilenos que viven aún un piso más abajo,en el subterráneo mismo de
la miseria? Sí,el circo se ha ido. Pero tras la carpa vislumbramos que aquellos que,con nuestros
votos,supuestamente vigilaban nuestras pobres fantasías de Igualdad,estaban sentados a la mesa
de los dueños del País,riéndose a todo chancho de estos estúpidos,o sea nosotros.
No vale la pena ahondar en esto ni dar nombres,ya que todos los conocemos de sobra. Las máscaras
han caído. No se trata,como dicen muchos "operadores" y otros distorsionadores de la politiquería
miserable que nos envenena,de "problemas comunicacionales". No,señores,rotundamente,no.
Se trata tristemente,de la fractura profunda de ese cimiento que sujetaba el conjunto de esa rara
construcción "cuyo conjunto sólo podrá ser descubierto con más tiempo,más silencio,más retroceso".
El público está satisfecho y durará el círculo de aserrín,ahí en la plaza,hasta las primeras lluvias
y los primeros olvidos,no hemos comprendido nada,en absoluto,de lo que ha pasado y eso será
nuestro único premio. Volveremos a conversar en familia. Alguno,quizá,recordará las fanfarrias
y los fuegos artificiales. Pero el circo se ha ido y los leones se están comiendo al domador.

Que Tengan Muy Buenas Noches.
Que Descansen.

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