martes, 3 de marzo de 2015

Los Monstruos del "Super Lunes".


"El Sueño de la Razón produce Monstruos" es un famoso grabado de Goya que muestra a un
hombre durmiendo en su escritorio,a medias sentado en su silla y a medias echado sobre la
mesa,mientras lo acecha alrededor un montón de bestias volátiles (con apariencia de búhos y
murciélagos) y un extraño felino. Lo más perturbador del cuadro no son estos bichos,por cierto,
sino su título,cuya ambiguedad se presta para variadas interpretaciones y hasta contradicciones.
El punto de la discordia es,desde luego,la palabra "Sueño". Según quien la lea,la frase puede
significar cualquier cosa. Cada quien ve lo que quiere ver o puede ver. Cuando la razón fantasea
o imagina,produce monstruos.
Las aspiraciones de la razón,de cumplirse,producirán monstruos. Cuando la razón se duerme,
los monstruos llegan..Y así.
Ahora que lo leo,me pregunto con qué objeto escribí lo que acabo de escribir,si estaba pensando
en otra cosa. El caso que estaba pensando en el llamado "Súper Lunes",que quién sabe cómo
trenzó sus hilos con todo lo demás:caso CAVAL,caso PENTA,caso Volcán Villarrica,caso
Caimanes,caso Vestido..(¿era azul con negro o blanco con dorado? todavía me queda la duda),
caso Incendios del Sur,caso Echarpe (Festival de Viña..¿fue por deferencia o la obligaron?).
Estaba pensando,pues,en la histeria.
A veces me da la impresión de que estamos en 1910,esperando la llegada del Cometa Halley,
cuya cola nos terminará de liquidar,chamuscándonos la última reserva de inteligencia. Vivimos
en la espera del Gran Desastre,azuzando el pánico por todos los medios.
Esa paranoia de la catástrofe interna,llevada como está incluso al ámbito de la banalidad,hace
confundirlo todo,histéricamente. ¿Qué era el "Super Lunes"? Nunca se supo,pero los periodistas
se lo tomaron como si se tratara de una invasión extraterrestre,el mismo ánimo hiperactivo (la
mente con casco y chaleco antibalas,todo muy infantil,como de tarea liceana) con que pronto los
veremos entre los útiles escolares de la calle Meiggs o entre los pescados y mariscos de Semana
Santa. Ya no son noticias curiosas,apuntes simpáticos del día a día: son verdaderos despliegues
de la sinrazón,operativos cuyo volumen reduce a una nimiedad informativa los últimos degollados
en Medio Oriente,la impotencia nacional ante los incendios forestales o los contubernios cada
vez más oscuros y obscenos entre políticos y las familias millonarias chilenas.
En el terremoto del 2010,el momento en que ese infantilismo periodístico hizo aguas en medio
de la desgracia poniendo el foco en la minucia de los saqueos,en vez de apuntar hacia el fenómeno
general. Era triste y lamentable. El País estaba en el suelo,derrotado física y anímicamente, y
encima parecía haber quedado a merced de un club de reporteros adolescentes.
Entonces no sabíamos que ese espíritu bananero iba a adaptarse tan bien a esta tierra,pero ya lo
vemos: ahora es un estilo nuestro,casi autóctono.
Quizás no sea más que una broma pasajera,como las modas,y en un tiempo corto más adelante
ya no esté. Quién sabe.
Mientras tanto,volvamos a Goya,a pensar qué cresta significa que los monstruos nazcan del sueño,
de la siesta de la razón.

Que Tengan Muy Buenas Noches.
Que Descansen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario